viernes, 22 de julio de 2011

CUENTACUENTOS

Contaba ella de una infiel gata sin dueño más fiel que el espejo. Que colgaba a su sonrisa, sólo por sonreír, una boca cuya llave había lanzado a la luna. Por lo mismo ella amaba , amaba de tal manera todo lo que jamás conoció, que contaba sin parar sus historias sin finales.