martes, 8 de noviembre de 2011

SIMPLEMENTE

Me gusta mantener el verso por un buen tiempo entre el paréntesis de mi boca. Lo estrujo lo acaricio con mi lengua. Como si fuera una goma de mascar aveces explota otras, se va al tacho. Suavizo sus aristas. Me deleito en nuestro tiempo suspendido, compartido. Y nacen colores que escribo, de sus mil sabores distintos .