lunes, 15 de agosto de 2011

DESPUÉS DE TANTO QUEDARSE


La casa queda para ti,
con trastos que una vez fueron nuevos
como nosotros
me voy con el centímetro de patio
que no alcancé a plantar
con sueños pendientes adheridos a la almohada
con los pocos vasos
que compartieron nuestras bocas
en fin,
con todas las melancolías
que jamás me dejarán.

Entre los muros te dejo mi ocaso,
las mañanas de mal genio
la locura de querer, la risa de vivir.
la caricia de ladrona, niña madre
mujer

Qué más da
que me valla hoy o mañana
si jamás nos encontramos.
Podría haber sido una novela, un triller,
una mala peli de aquellas

Se quedan
las murallas firmes en sus clavos
los cuadros que ya no alumbran
noches frías con días que seguían
las ventanas sentadas
esperándote llegar
la risa de los chicos en la alfombra
los cadáveres exquisitos ,
los puzzles
las maquetas
los remedios que me salvaban
de ti
y de mi

Persiste la casa con su techo
dejo las llaves y las puertas abiertas
para que entre, lo que tenga que pasar.
Yo
a partir de esta maleta,
me voy con mi columna a cuestas
con los dientes enteros
y los pulmones negros
hacia mi