jueves, 6 de septiembre de 2012

En su eterno lecho de muerte
Ella
la que nunca debería morir,
agoniza.
Estado paralelo, inevitable
                     y al otro lado de la escalera
                                                  cara a cara,
aferrado a la baranda, el infierno
( que por cierto no es la muerte).


Ven a desayunar, cena conmigo y con Ella,
bebamos de esta mesa colectiva que ya viene.

Nos abrazaremos con angustias, tormentos y zozobras,
colgaremos marionetas en las ventanas, flores y cactus,
somos humanos,
(esencia de los meridianos).

Hasta el borde del fondo...caminaremos  hablaremos,
intentaremos  amar,
ocurrir,
              soñar naturalmente este ritual.

Nadie nos llamó, no postulamos
                 ( ¿o sí?)
¡Ah...qué  primer Misterio tenebroso!.

Una larga Sopa Primordial y  la muerte de la luz,
del colapso,
del  círculo del ojo y la reflexión.
Elemental cubo de rubik donde me confieso perdida.
Ella nos  hará  deambular sin fin,
todos los colores.