lunes, 13 de mayo de 2013

Agua en cada ventana,
hoy.
Hoy que pudo ser ayer,
viernes, o martes.
Hoy de aquellos sin nombre,
por accidente,
pero fue hoy,
agua.
Brotó de los árboles, de los vehículos,
de la estación del metro,
de la luz,
llenó los estanques de la cordillera,
subió por muros y perros,
fluyó por las manos, los niños, por el aire.
Toda la cuidad estaba mojada, bolsos,
pies, cabezas, mi alma incesante,
inundada.