Cómo decirle que estoy
gastada, exterminada de tanto
De qué manera pido perdón a mi piel, a mi carne,
por esta brevedad que estrecha?
De qué manera pido perdón a mi piel, a mi carne,
por esta brevedad que estrecha?
Cómo explico a estos huesos que somos 1
unidad/indivisible/irrenunciable/inaguantable
y sin embargo...
La sombra es un ser aparte, su propio esqueleto,
sin pulsione ni análisis
pertenece a la oscuridad de cada letra que conforma su nombre
unidad/indivisible/irrenunciable/inaguantable
y sin embargo...
La sombra es un ser aparte, su propio esqueleto,
sin pulsione ni análisis
pertenece a la oscuridad de cada letra que conforma su nombre
Cómo cambiar la pequeña matemática
Que se han detenido los navíos
el silencio no existe
todo el cuadro es un gran libro tortuoso, restas y
menos.
el silencio no existe
todo el cuadro es un gran libro tortuoso, restas y
menos.
Fue corto el tiempo en milímetro en que
lo amé, fueron ratos, intervalos, breves, nada y una taza de café
.
.
Fue un pez
se dejó ir.
Por qué esto…?
no sé escribir de amor, ni de ortografía ni un buen argumento
no sé escribir de amor, ni de ortografía ni un buen argumento
mi tristeza cae triste como gotas invisibles fluvial, a las 10 de la mañana, a
las 3 de la tarde
arqueada. (en este gran libro matemático, enigma )
Supo-sabe de mis tigres, de
mis leonas, de los zorzales que regué
para adornar los muebles de su casa.
Usted sabe de todas las luces que necesitaba
cuando salía a la ventana a mirar el mundo pasar, con autos, de la mano, con la
bolsa del pan, con la urgencia metida hasta el fondo de los huesos, los la
esperanza colgando de la ventanilla de la micro, lleno de rostros perfectamente
olvidables, sucintos, amplios o estrechos y yo salía a la ventana.
Sólo eso, un rayo de caridad, de calidad, de
cantidad, de claridad, luz, aire limpio, una planta creciendo, brotando, una
exhalación, una centella bastaba,
pero su bosque…era tan
suyo, sus aguas...eran tan suyas, sus ojos eran eternamente suyos puestos ahí,
allá, detrás, al otro lado, más allá, más allá… yo tan pequeña de alta, de celosa, tan elemental
y expuesta, tanto sauce...
En esta ausencia de lo suyo le digo: No tengo
cuerpo ni voluntad, sólo un temblor constante en estas manos, que irán
envejeciendo, como tronco vacío.