ORA PRO NOBIS
una calle boca arriba,
mil lamentos desatados,
yo
acá.
Santa María, Ora pro nobis.
Por los demonios del sueño,
el desgaste del pecado,
el cuerpo rojo del vino,
una boca mal parida,
las uñas en la muralla,
muros con pegamento,
lágrimas en la boca,
y
acá.
Santa María, Ora pro nobis.
Por la mentira en el iris,
el calor que nos enfría,
el hijo que no tuvimos,
las muertes inconfesables,
la ofrenda rota del tiempo,
las migajas en el pan
de cada día.
Santa María, Ora pro nobis.
Por las uvas en los almendros,
el trayecto del silencio,
la sangre que inyecta agua
en el corazón vacío,
un abril estacionado
bajo el árbol del pasado,
un desamparado vientre
en una picadora añeja,
y clic,
y clic,
y clic,
la pisada de los enfermos,
un hospital descalzo,
y yo
acá.
Santa María, Ora pro nobis.
Por la locura que habita
el trastorno de las letras,
la necesidad de amar
y no entrar,
llamar
no encontrar,
el espanto de la espera en la nuez de los engaños,
y tragar,
y tragar.
Santa María, Ora pro nobis.
Por el estado del sexo
cuando no se besa un nombre,
la piel en venta en un lienzo,
la oferta, los compradores,
el mercado de recursos
de pecados capitales
(facilisimo
men - tal),
soledad
(santa - mente,
oscuridad).
Santa María, Ora pro nobis.
Dos rodillas contra suelo,
el suelo contra la espalda,
la espada contra mi pecho,
un ángel que no me aguarda,
los estertores de alma,
un canto que sabe a grito,
por la unción rota de
mi rebelión.
Santa María, Ora pro nobis.
El olvido de la infancia en dos zapatitos blancos,
una vela que se apaga,
por la llama del navío
en el mar,
en un sordo mar.
Santa María...
...Ora pro nobis.